Debemos transformarnos constantemente, acompañar la transformación del mundo en el que vivimos. De lo contrario, nos perderíamos en la senda histórica.
(Passetti y Freire, 2018)
En el proceso de construcción de los vínculos escuela-familias, tan fundamentales en educación infantil, influyen las subjetividades y realidades propias de nuestros tiempos globalizados. Éstas conviven y transforman los contextos físicos, sociales y económicos de los diversos territorios de América Latina.
¿Cómo puede la escuela recoger tal diversidad, respetando y acogiendo las infancias? ¿Qué variables inciden en cómo se relacionan familias y escuelas? ¿Cómo puede la escuela contribuir a fortalecer vínculos seguros con las familias, con el reto de dar el espacio adecuado a cada niño y niña? ¿Cuáles podrían ser los aspectos globales que inciden en un contexto saludable, dónde prime el interés superior de los niños y niñas desde su gestación?
La familia es una institución en profundo cambio en nuestra sociedad globalizada. Uno de los más llamativos, especialmente tras los tiempos de pandemia, es la convivencia cotidiana con la tecnología, realidad que está llegando incluso a los territorios más alejados de las grandes urbes. Nos atrevemos a pensar, que los grandes cambios que se avecinan en nuestras sociedades globalizadas vendrán de la mano de la tecnología y su producto, la inteligencia artificial. En la escuela no podemos obviar esta transformación que impacta de forma directa en la vida de los niños, niñas y familias. Los televisores, los móviles y especialmente las tablets están pasando a entretener a nuestros niños más pequeños durante muchas horas al día. Las familias aprovechan este recurso para hacer otras cosas, a veces para descansar, dejando a las criaturas bajo la “supervisión” de las pantallas. La máquina sustituye al humano en una multitud de funciones, cada vez más sofisticadas, en un proceso en el que perdemos capacidades y habilidades. Ya existen aparatos que intentan traducir el llanto de un bebé a unos padres cada vez más inseguros de sus habilidades parentales. La escuela infantil puede jugar un papel muy importante devolviéndoles a las familias sus saberes propios, aquellos ligados a su cultura, a su comunidad, a sus vivencias de cómo fueron cuidados por sus madres, por sus abuelas…
“La familia es una institución en profundo cambio en nuestra sociedad globalizada”
“La máquina sustituye al humano en una multitud de funciones, cada vez más sofisticadas, en un proceso en el que perdemos capacidades y habilidades”
Otro aspecto, que nos afecta de forma global aunque obviamente no con la misma urgencia en todos los territorios, es la vivencia cotidiana de los estragos provocados por los cambios ecológicos y climáticos. La vida de las familias se aleja cada vez más del contexto natural, las ciudades se han comido la naturaleza y, en los pueblos, las aldeas, las selvas, la llegada de los grandes intereses económicos que esquilman los recursos naturales está dejando a las poblaciones locales sin la posibilidad de continuar conviviendo en y con su entorno ecológico. El campo se vacía y las ciudades cada día crecen más, convirtiéndose en enormes monstruos en los que la proporción que ocupa y habita la familia, con sus pequeños y sus mayores, parece ser insignificante. El niño y la niña sufren de primera mano esta carencia de espacios verdes donde jugar, cuando no, sufren directamente en su salud el envenenamiento del suelo o la carencia de agua potable. Desde las grandes urbes como Sao Paulo, Quito o México DF, a la zona sur de la Patagonia Argentina y Chilena, el Sertón brasileño, o la Sierra Peruana, en todos esos lugares existen escuelas infantiles que atienden a niños y niños de familias que se encuentran de una u otra manera atravesadas por la crisis ecológica.
“El niño y la niña sufren de primera mano esta carencia de espacios verdes donde jugar, cuando no, sufren directamente en su salud el envenenamiento del suelo o la carencia de agua potable”
Estamos siendo partícipes de otros cambios ligados a los tiempos que, sin embargo, parecen proyectar algo de luz y de esperanza en nuestra humanidad. Aquí en primer lugar pensamos en los cambios que tienen que ver con el lugar de la mujer en la sociedad. Los movimientos feministas, especialmente potentes y fuertes en todo el territorio latino americano y hacia los que Europa dirige su mirada, representan quizás uno de los cambios más potentes que está transformando nuestras subjetividades colectivas, por lo menos en el mundo occidental. Todo este proceso, está conllevando una transmutación de las familias, cuestionando los valores patriarcales en los que se ha fundamentado la institución. En multitud de territorios, las mujeres y en ocasiones también los hombres, buscan maneras más democráticas, más igualitarias de convivir, compartiendo el poder privado y el público, y reivindicando el valor de los cuidados como un bien común cuantificable aunque no mercantilizable.
“En multitud de territorios, las mujeres y en ocasiones también los hombres, buscan maneras más democráticas, más igualitarias de convivir”
Comprender los tiempos que corren y cómo afectan a las familias, es una tarea que nos toca a las y los profesionales de la educación infantil. Estar abiertos a los tiempos a la vez que ser sensibles a los contextos culturales, sociales y económicos en los que las escuelas están emplazadas es una tarea exigente y que debe ser constante. Preguntarnos por las realidades físicas y psicológicas de las familias, por sus condiciones habitacionales, por sus posibilidades económicas, por sus saberes ancestrales, por sus intereses, por sus valores, nos ayuda a entender y por lo tanto a vincularlos, no desde una posición de “expertos” sino desde una posición profesional de apertura y voluntad contínua de construir y avanzar, familias y escuelas, hacia una sociedad participativa, democrática, fuerte y saludable.
El valor que desde la escuela se otorgue a la construcción de los vínculos con las familias, determinará en gran medida la calidad de la atención a los niños y niñas de 0 a 6 años.
Consejo de redacción de España
Referencias
Passetti, E., y Freire, P. (2018). La voz del maestro. Buenos Aires: Siglo Veinteuno Editores