Allí donde hay relaciones afectivas importantes, los mecanismos del apego se ponen en juego. Cuando los conocemos, estos mecanismos nos permiten entender mucho mejor a nuestras criaturas, descifrar el sentido de algunas de sus conductas «difíciles» y ofrecer las respuestas que mejor pueden ayudarlas a tener seguridad y a desarrollarse de forma integral en la