La sociedad tiene el deber de ser solidaria y proteger mejor a las personas mayores, uno de los grupos más afectados por la pandemia del Covid-19, dice una experta de la ONU en derechos humanos, y advierte que las medidas de distanciamiento social no han de convertirse en exclusión. Según Kornfeld-Matte la distancia física es vital, pero se deben hallar maneras creativas y seguras para incrementar las conexiones sociales. Las comunidades y todas las generaciones deben unirse para sortear esta crisis con solidaridad.