“La memoria despierta para herir
A los pueblos dormidos
Que no la dejan vivir
Libre como el viento.”
León Gieco
Durante los años 2020 y 2021 la educación, en todos sus niveles y modalidades, se vio mediada por las tecnologías. En la Argentina, como en otros países de Nuestra América y del mundo, el intento de seguir haciendo escuela aún sin presencialidad, hizo que se fueran construyendo progresivamente modos de enseñar y aprender lejos de los edificios escolares. En los institutos de formación docente esto presentó un doble desafío. Por un lado el diseño de intervenciones de enseñanza en aulas virtuales1 resultó para muchas y muchos docentes una práctica nueva o poco habitual. Por el otro, se ponía de manifiesto la necesidad de considerar especialmente las nuevas formas en que los niveles educativos obligatorios2 llevaban adelante sus propias acciones para seguir haciendo escuela cada día. Dialogar con esos modos, considerar en cada caso cómo aprenden las niñas y los niños en un territorio marcado por la desigualdad, y construir intervenciones en el marco del diseño de las políticas educativas nacionales y provinciales que iban ofreciendo orientaciones para la tarea en ese contexto, fue un reto en tiempos complejos.
El vínculo entre la formación docente y el nivel inicial
En el inicio del ciclo lectivo 2022, en los institutos de formación docente de la provincia de Buenos Aires nos volvía a convocar el encuentro presencial y la tarea central de los profesorados: enseñar a quienes van a enseñar.
Durante los años de pandemia, la formación docente en sus espacios de la práctica3, acompañó a los jardines y a las escuelas en las intervenciones de enseñanza. Donde se hizo escuela, allí estuvieron los institutos de formación con sus estudiantes, y eso requirió de seguir sosteniendo el vínculo entre el profesorado y los jardines de infantes.
La experiencia que queremos compartir, desde el Instituto de Formación Docente y Técnica N°56 (ISFDyT) de la localidad de González Catán, La Matanza, provincia de Buenos Aires, refiere particularmente a ese vínculo entre la formación docente y el nivel inicial. Relación que consideramos central para las trayectorias educativas de quienes serán maestras y maestros en los jardines de infantes.
Nuestro Instituto está ubicado en el conurbano bonaerense. Posee una matrícula de aproximadamente 3500 estudiantes. Muchas y muchos de los cuales provienen de familias trabajadoras, donde el acceso al conocimiento como bien público y derecho personal y social4 no ha sido garantizado. Entre las y los estudiantes, se encuentran jóvenes y adultos recién egresados de sus estudios secundarios5 que deciden la docencia como profesión para sus vidas. La matrícula está compuesta mayormente por mujeres, muchas de las cuales son madres que sostienen un hogar en condiciones de precariedad, desigualdad profunda que impone el neoliberalismo en la vida de los sectores populares. Cabe destacar además que ellas y ellos, en un porcentaje muy importante, resultan ser las y los primeras/os egresadas/os de sus familias con estudios superiores.
El Instituto 56 “Educadores para la libertad” históricamente ha reconocido lo que significa la importancia de ampliar los universos culturales y simbólicos de aquellas y aquellos que pronto recibirán a las infancias en las aulas. Desde allí, surge la necesidad de seguir sosteniendo una variedad de acciones, para ofrecer otros mundos posibles a quienes recibirán a los nuevos en sus primeros años de escolaridad.
Educar, un gesto de recibimiento: cuando la memoria echa raíces.
El oficio de profesor tiene que ver con el amor. Con el amor al mundo y con el amor a la infancia, entendiendo esta última como “novedad (en el mundo) y como capacidad de comenzar” (Larrosa, 2018)
Frente a la vuelta a la presencialidad teníamos una preocupación traducida en preguntas: ¿cómo recibir a las y los estudiantes del profesorado después de dos años de una propuesta educativa mediada por la tecnología? ¿Cuáles podrían ser las primeras acciones de ese recibimiento? ¿de qué manera iniciar una inscripción en los legados culturales e identitarios del instituto con estudiantes que nunca habían transitado nuestro edificio escolar? ¿Cómo acercar las historias y memorias de las luchas por la democracia?
A partir de estas preguntas, reconocíamos que necesitábamos una acción educativa colectiva y políticamente amorosa, que recibiera a todas y todos para abrigar con distintos ofrecimientos, el inicio de la bienvenida. Unas puertas abiertas como aula ampliada, donde las y los estudiantes pudieran encontrar, en formas diversas de la transmisión, la acción siempre esperanzada de educar para una sociedad más justa, democrática e igualitaria.
Al mismo tiempo, y habiendo recibido la invitación desde la Dirección Provincial de Educación Inicial (DPEI), docentes del instituto, veníamos participando de las acciones que se llevaban adelante en el marco del proyecto “El árbol de las abuelas. Itinerario de infancias y memoria”6 . Con ese proyecto dicha dirección, jerarquizando el reconocimiento de los derechos de la primera infancia, proponía la educación en la memoria y los derechos humanos en el nivel inicial, como aporte fundamental para la construcción de una ciudadanía democrática.
Dentro de ese marco participamos de la recolección de semillas y armado de plantines de la acacia carnaval. Los que viajarían a lo largo y a lo ancho de toda la provincia, para llegar a las manos de las niñas y los niños en cada jardín. Formar parte de esa acción y recibir un pequeño árbol para el instituto, nos permitió recorrer un camino que volviendo a las preguntas, pusiera en el centro de la escena la acción colectiva del plantado de la acacia como primer gesto de bienvenida, para construir alrededor de ella una jornada de memoria y recibimiento.
El diseño de la jornada: “Educadores para la libertad y el árbol de las abuelas”, convocó a docentes de todas las carreras del instituto, al centro de estudiantes y las cipes7. La misma consistió en una experiencia situada que trascendió el aula para el reencuentro. Se ofrecieron diversos entornos educativos como legados culturales a favor de la memoria, los derechos humanos y la construcción de prácticas democráticas. De esta manera se armaron diferentes espacios donde cada estudiante pudo elegir su propio recorrido y/o participación. La semana previa a la jornada se dispuso en los lugares comunes del Instituto, una muestra: Educar en la memoria para construir el futuro, solicitada al Museo de las Escuelas8. En la entrada del edificio el día de la jornada, se desplegó una instalación alrededor de un gran árbol donde unas tiras de colores y diversas palabras que referían a: hacer educación y construir memoria, estaban disponibles para que las y los estudiantes intervinieran el espacio.
Los entornos educativos se distribuyeron en las aulas del instituto, los mismos estuvieron a cargo de profesoras/es, cipes, estudiantes e invitados especiales para la jornada. Fueron variados en sus contenidos y formas, pero todos organizados alrededor de la actividad central del plantado del árbol de las abuelas.
Los ofrecimientos fueron los siguientes:
•Lectura y Memoria “Prohibidos y Atesorados” Libros, lecturas y sentidos.
•Memoria y Medios de comunicación. Recorridos sobre participación de los medios de comunicación antes, durante y después de la dictadura.
•La Memoria de Malvinas Conversatorio, espacio de lectura y proyección de producciones.
•Malvinas antes de Malvinas Lectura de cuento y conversatorio
•Historia y Memoria. Recorrido desde la fundación del
Instituto y su participación en la historia colectiva.
•Espacio de Arte y encuentro Recuperación y ampliación del mural sobre Memoria.
•Pintamos Memoria Intervención artística en vía pública. Actividad abierta a la comunidad.
•Charla “Prohibido no leer” Testimonio de un maestro y su estudiante (hoy directora de una escuela primaria) narrando los modos de leer los libros prohibidos, mediante el cambio de sus tapas, durante la dictadura cívico militar iniciada con el golpe de Estado de 1976.
•Infancias Robadas. Nietos y Nietas, presentes. Ahora y Siempre Proyecto Institucional sobre la labor de las Abuelas de Plaza de Mayo.
•El árbol de las Abuelas Actividad Central. Plantado de la Acacia Carnaval. Proyecto de la DPEI con invitación a la DPES
•En el cierre de la jornada: Profes Cantores y presentación de la Murga del instituto.
Esta experiencia, que reunió la propuesta de la DPEI desde el proyecto “El árbol de las abuelas. Itinerario de infancias y memoria” y nuestra propia inquietud por el recibimiento, nos permitió el reencuentro educativo con las y los estudiantes para dar la bienvenida desde una acción colectiva. Así mismo posibilitó: visibilizar y construir acciones en el marco de una pedagogía por la memoria, la verdad y la justicia en defensa de los derechos humanos, instituir en nuestro espacio de formación docente, una jornada en torno al 24 de marzo9 y construir sobre lo andado, en términos identitarios, para pensar el porvenir de sociedades más justas, igualitarias y democráticas en nuestra América Latina.
Los derechos, aquello a lo que todos debemos tener acceso, lo que es universal por excelencia, no siempre es una realidad, ni en la sociedad ni en la escuela. Enseñarlos es ofrecer un aprendizaje que excede lo escolar, que concierne a la Vida misma del sujeto y a la ciudadanía plena. Graciela Frigerio10
Notas:
1. La provincia de Buenos Aires ya contaba con la plataforma
INFoD y muchos de los institutos venían trabajando con aulas como modo posible de acompañar la enseñanza, para ofrecer materiales digitalizados visuales, textos digitalizados o como alternativa de sostén de la comunicación. Otros institutos tuvieron que armar el espacio con la urgencia que la tarea misma requería.
2. La Ley de Educación Nacional Nº 26.206 de 2006, art N°16, 17. Ley de Educación Provincial N° 13688 de 2007, art N° 16, 20, 21, 24.
3. En los Diseños curriculares de todas las carreras docentes en la provincia de Buenos Aires, los espacios de la práctica como acción de llegada a los ámbitos educativos y escolares del nivel, vertebran la formación desde 1ro a 4to año.
4. Ley de Educación Nacional N° 26.206 de 2006, art N° 2.
5. La Ley de Educación Nacional Nº 26.206 de 2006, art N°29, 30. Ley de Educación Provincial N° 13688 de 2007,
art N° 20, 28.
6. Material de la DPEI: https://www.pearltrees.com/s/file/preview/264985985/El%20arbol%20de%20las%20abuelas.%20Itinerarios%20entre%20infancias%20y%20memdoria..pdf?pearlId=435415754
7. Las y los Coordinadores Institucionales de Políticas Estudiantiles (Cipes) tienen como propósito entramar su labor dentro de las dinámicas de los ISFD e ISFDyT, y se constituyen como referentes para las y los estudiantes en relación con las tres líneas de trabajo: fortalecimiento de trayectorias, participación estudiantil
y experiencias culturales.
8. El objetivo de la muestra es educar en la memoria sobre los hechos traumáticos para las sociedades. Su núcleo principal son los efectos en la educación y la cultura argentina de los golpes de Estado de 1966 y 1976. El Museo de las Escuelas posee muestras itinerantes con diversas temáticas, las mismas pueden ser solicitadas por las escuelas para su exposición.
9. Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia (Leyes Nacionales. N°25633 y N° 26085)
10. Cita del prólogo de: Gentili, P. (coord.). “Códigos para la ciudadanía. La formación ética como práctica de la libertad”. Santillana, Buenos Aires, 2000.
Karina Pugliese, Yanina Rabbino, Rosario Rivarola, Isabel Ruiz y Margarita Botaya
Profesoras del ISFDyT N°56 que dieron escritura a una experiencia colectiva)